Usach obtiene patente de invención en Japón con tecnología que optimiza la productividad del iodo 

La innovación desarrollada por el Dr. Ricardo Vega, académico e investigador de la Facultad de Ingeniería, permite mejorar la eficiencia del proceso de refinación de este mineral, reduciendo sus costos e impacto ambiental. La tecnología ya cuenta con patente en Chile y se encuentra lista para su transferencia a la industria.

La tecnología denominada Fusión Autógena de Iodo (FAI), desarrollada en la Universidad de Santiago de Chile, obtuvo patente de invención en Japón, registro que se suma al conseguido en Chile y la presentación de solicitud de patentamiento en Estados Unidos.

Esta innovación es liderada por el Dr. Ricardo Vega Viveros, académico e investigador de la Facultad de Ingeniería (FING), y surgió como una solución a los problemas del proceso de refinación del iodo en nuestro país, caracterizado por ser discontinuo, complejo, costoso y ambientalmente riesgoso.

La tramitación de la patente fue apoyada por la Dirección de Gestión Tecnológica. Su director, Rodrigo Morgado Contardo, subraya que “este es un paso clave, en el cual no sólo se protege la propiedad intelectual de la invención, sino que también facilita su transferencia tecnológica al mercado nacional y extranjero, abriendo oportunidades para generar acuerdos con empresas interesadas en implementar FAI”.

 

Impacto de la tecnología en Japón

“Recibo feliz y muy contento la noticia de la obtención de la patente en Japón. En general, Asia es un campo complicado para el patentamiento, por lo que este es un hito muy relevante”, enfatiza el Dr. Ricardo Vega.

El investigador resalta que Chile y Japón lideran la producción mundial de iodo, el cual es altamente demandado por industrias como la farmacéutica, tecnológica y alimentaria. Sin embargo, los altos costos asociados a su extracción y producción se encuentran entre los principales desafíos que deben enfrentar las empresas productoras.

“En Chile, la extracción del iodo proviene del caliche, mientras que en Japón se obtiene de pozos petrolíferos, a los cuales se les introduce agua y, eventualmente, colapsan, haciendo que sus costos productivos sean mayores que los nuestros, acota el académico. En ese contexto, “la patente puede tener un impacto significativo en la disminución de dichos costos, en particular durante la etapa de refinación del mineral”, sostiene.

Agrega que la tecnología también presenta otras ventajas, como “reducir los costos de inversión y operación, homogenizar la calidad del producto y minimizar las pérdidas por menor exposición del iodo, lo que evita su sublimación y torna el proceso menos contaminante”.

Escalamiento industrial 

Actualmente, FAI ha sido desarrollado como prototipo a nivel industrial y probado exitosamente en un ambiente real, gracias a la colaboración entre la Usach y Autoterm, empresa de ingeniería y montaje dedicada a la automatización de procesos.

“Tenemos muchas expectativas con este piloto como unidad productiva”, señala el Dr. Ricardo Vega. De escalar su transferencia al mercado, sólo en Chile podría llegar a “producir más del 10% de la producción nacional del iodo”, puntualiza el académico.

Conoce más detalles de esta tecnología, en este link.

Autora: Paola Armijo León

Fotografía: Comunicaciones y Marketing Vriic

Tags: Propiedad Intelectual

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